viernes, 30 de noviembre de 2007

El tiempo de las cerezas (Enrique Bunbury)

Hay momentos en la vida en los que uno se da cuenta de que algo ha llegado a su fin y que es inútil continuar esforzándose en seguir adelante con la esperanza de que las cosas cambien y tomen el rumbo esperado. Aunque al principio sea la decisión más difícil y dolorosa, en estos casos la mejor opción siempre suele ser abandonar y emprender un nuevo camino con una nueva ilusión y con la esperanza de no repetir la experiencia del fracaso. La canción del mes de Noviembre de 2007 es “El tiempo de las cerezas” de Enrique Bunbury. Me sabe muy mal nombrar canción del mes una de Bunbury justo después del monográfico de Héroes del Silencio, y más cuando ya tenía en mente otros planes, pero este tema parece estar escrito para la ocasión, para este final de mes que ha sido clave para aclarar ideas y acabar de tomar algunas decisiones que debería haber tomado hace mucho tiempo.

“El tiempo de las cerezas” fue publicada el año 2006 en el doble LP homónimo editado conjuntamente por Enrique Bunbury y Nacho Vegas, un disco en el que cada uno compuso y cantó sus propias canciones pero para el cual compartieron banda, productor y estudio de grabación. En esta canción ni mucho menos tenemos la oportunidad de disfrutar de una de las mejores interpretaciones vocales de Enrique Bunbury, ni se trata de una canción excesivamente compleja musicalmente hablando al estar instrumentada únicamente con un par de guitarras acústicas y un discreto piano. A pesar de todo, para mí quizás sea la canción que más emociones me transmite de las últimas cincuenta que ha publicado Enrique Bunbury en solitario.

Sin más que decir porque la letra de “El tiempo de las cerezas” lo dice todo, os dejo que la escuchéis y quien quiera entender que entienda.

Ficha Técnica:
· Título: El tiempo de las cerezas
· Álbum: El tiempo de las cerezas
· Año: 2006
· Intérprete: E. Bunbury, X. Pereda, Copi
· Autor: E. Bunbury

Escucha un fragmento:


“Es momento de ir yéndose poco a poco, el tiempo de las cerezas nunca llega a Noviembre”

jueves, 29 de noviembre de 2007

Actos inexplicables (Nacho Vegas) 2001

Primer disco en solitario del gijonés Nacho Vegas tras su paso por la formación Manta Ray. Desde la publicación de "Actos inexplicables" hasta aproximadamente el año 2005, Nacho Vegas consiguió ganarse un lugar preferente y una muy buena reputación dentro del círculo de la música independiente española, convirtiéndose en poco tiempo y sin tener demasiados discos en el mercado en un artista de culto para su pequeña aunque fiel parroquia de seguidores.

La situación anteriormente comentada cambió en el año 2005 tras su participación en los espectáculos circense-musicales de Enrique Bunbury denominados “Freak Show”, y mucho más con la publicación en el 2006 de “El tiempo de las cerezas”, un álbum grabado de forma conjunta con el mismo Enrique Bunbury. A partir de esta asociación, Nacho Vegas ha dejado de ser un músico minoritario seguido únicamente por un público selecto para pasar a estar en el punto de mira de páginas web, foros y publicaciones varias dedicadas a Bunbury y a todo lo que le rodea. Nada tiene que ver musicalmente el uno con el otro pero pocos son ya los fans de Bunbury que ahora no lo sean también de Nacho Vegas.

Si tengo que ser sincero, nunca me he sentido atraído por la música ni el estilo de Nacho Vegas a pesar de lo bien que siempre me han hablado de él. Lo que me ha llevado a investigar de una vez por todas su carrera en solitario ha sido la curiosidad por conocer a fondo el trabajo de ese tipo tímido, triste y taciturno que compartió discos y escenarios con Enrique Bunbury (artista al que sí sigo en solitario aunque no admiro), y de esta forma comprobar la coherencia de aquellos que admiran al uno y por consiguiente también al otro. He de decir que dicha coherencia vuelve a quedar en entredicho una vez más porque ambos tienen que ver entre sí lo mismo que un huevo y una castaña, pero bueno, dejemos al margen este tema y pasemos a analizar “Actos inexplicables” que para eso estamos aquí.

Cuando se escucha este disco desde un punto de vista objetivo y sin ningún tipo de intoxicación exterior, se tiene la sensación de estar escuchando una serie de cartas o extractos del diario de un tipo atormentado y maltratado por la vida leídos en voz alta y a los cuales se les ha puesto música. Las letras son tan íntimas y hablan de cosas tan supuestamente personales que en la mayoría de los casos resulta complicado sentirse identificado con ellas más allá de alguna frase o algún fragmento concreto. En sus canciones Nacho Vegas cuenta historias o vivencias personales, siempre hablando en primera persona o haciendo claras alusiones a terceros, como es el caso de su difunto padre Simón, su hermano Javier o algunos otros amigos y conocidos que van apareciendo a lo largo del disco. El denominador común de la práctica totalidad de sus letras es la complejidad de los textos, la ausencia de estribillos y la enorme crudeza y tristeza que transmiten, un poco siguiendo-calcando el estilo de Bob Dylan o Leonard Cohen.

Musicalmente es un disco inclasificable. Los temas, de instrumentación variada, oscilan entre el folk, el pop, el rock, la música porteña y arrabalera, e incluso en ocasiones recuerda hasta al grunge. Todos ellos están basados en la continua repetición de ritmos y melodías muy simples sobre las que se encajan las letras en algunos casos de forma más acertada que en otros. Da la sensación de que la música y la letra son algo totalmente independiente y que no costaría mucho esfuerzo intercambiarlas entre sí.

Para finalizar, únicamente decir que la voz de Nacho Vegas es absolutamente nula y carente de energía. Si Frank Sinatra era “La voz”, podríamos decir que Nacho Vegas es “La no-voz”. Con decir que la canción del disco que más me ha gustado ha sido la primera creo que ya estoy diciéndolo todo. Imagino que él es totalmente consciente de ello y que precisamente utiliza su carencia de voz como elemento característico y diferenciador de su estilo.

Tras escuchar “Actos inexplicables” unas cuantas veces, la idea general que me queda de Nacho Vegas es que se trata de ese tipo de artistas que serían capaces de escribir grandes ensayos o libros de poesía pero que por desgracia se dedican a grabar discos líricamente potentes pero musicalmente mediocres tirando a pobres. De todas formas creo que un disco no es suficiente para juzgar a un músico, así que seguiré intentándolo con el resto de trabajos del asturiano.

martes, 27 de noviembre de 2007

Camisetas para todos

Este mes se han cumplido cinco años desde la aparición en Internet de "Camisetas para todos", la página web no oficial más completa de todas las dedicadas al músico argentino Andrés Calamaro. Para celebrar este quinto aniversario, declaro enlace del mes de Noviembre de 2007 a "Camisetas para todos": http://www.camisetasparatodos.com.

"Camisetas para todos" tiene absolutamente todas las secciones que se pueden esperar de una página web dedicada a un músico: biografía, noticias, discografía, letras de canciones, álbum de fotos, foro y colección de enlaces relacionados con el artista. Todas ellas son muy completas y están perfectamente actualizadas, pero evidentemente esta información también puede encontrarse en la página web oficial de Andrés Calamaro y con bastante mejor presentación al haber sido realizada por un equipo profesional. Es precisamente lo que no puede encontrarse en la página oficial de Andrés Calamaro lo que llama la atención y lo verdaderamente atractivo de esta web. Entre todas su secciones, "Camisetas para todos" ofrece la posibilidad de descargar una amplísima colección de conciertos, rarezas, versiones, experimentos musicales y vídeos de Andrés Calamaro, de forma totalmente gratuita y abierta a todo el mundo. Lejos de lo que pueda parecer, con esto sus administradores no están incurriendo en ningún delito contra la propiedad intelectual ya que cuentan con el consentimiento y el apoyo del propio Andrés. Prueba de ello es que en los últimos discos del argentino aparece la dirección de "Camisetas para todos" en la misma contraportada junto a su página web oficial y la de la compañía discográfica.

Podríamos decir que los administradores de "Camisetas para todos" han cumplido el sueño de cualquiera de los webmasters que invertimos nuestro tiempo y nuestro esfuerzo en la realización de una página web dedicada a un músico que admiramos. Se trata de algo tan simple y tan sencillo como que nuestro trabajo sea reconocido por el propio músico. Por esta razón me gustaría darles mi más sincera enhorabuena por estos cinco años de trabajo cada vez mejor hecho, esperando que después de éste vengan muchos años más.

Camisetas para todos: http://www.camisetasparatodos.com

Camisetas para todos

domingo, 25 de noviembre de 2007

Libertad (Velvet Revolver) 2007

Ha costado pero ya tenemos aquí el tan esperado segundo disco de Velvet Revolver, posiblemente la banda más mediática del rock americano. Algunos empezamos a ver al fantasma de Axl Rose cuando Velvet Revolver cayeron del cartel del festival “Monsters of Rock” celebrado en Zaragoza el pasado mes de Junio y cuando la publicación de su disco se pospuso unos cuantos meses, pero finalmente ya está en el mercado el segundo larga duración de la banda formada por Scott Weiland, Slash, Duff McKagan, Matt Sorum y Dave Kushner.

Fuimos muchos los que, conociendo el potencial de los músicos que componen Velvet Revolver (¡ojo, que digo músicos!), no quedamos demasiado satisfechos con “Contraband”, su primer álbum, y esperábamos como agua de mayo este segundo disco para comprobar si se había producido algún cambio. La verdad es que los cambios han sido más bien pocos aunque haberlos los ha habido. Si “Contraband” sonaba a Stone Temple Pilots que mataba, “Libertad” suena algo menos grunge y un poco más rockanrolero, pero continúa teniendo ese puntillo machacón que caracterizaba a la anterior banda de Scott Weiland. Tanto es así que si no nos dicen que tocan tres ex-miembros de Guns N’ Roses ni nos enteramos por lo que a estilo musical se refiere.

En “Libertad” las guitarras rítmicas y el bajo suenan un poco más a instrumentos de cuerda y un poco menos a instrumentos de percusión como ocurría en “Contraband”, aunque no por ello sus temas han perdido esa contundencia en los ritmos ya característica de Velvet Revolver. Dicha contundencia se ve reflejada en temas como “She mine”, “Get out the door”, “For a brother” o “Spy”. Está claro que con el cambio de productor el grupo ha ganado en cuanto a limpieza y claridad del sonido de las guitarras y de la voz, en esta ocasión menos tratada digitalmente, pero a nivel compositivo Velvet Revolver continúan en su línea de hacer temas muy básicos, pesados y repetitivos, adornados con algún solo de guitarra de esos que Slash se saca de su chistera (nunca mejor dicho) para convertir en aceptable cualquier tema por malo que sea.

Cabría destacar algunas canciones como “Let it roll” con la que se abre el disco, “Builds quick machine”, “The last fight”, “American man” con sonido de castañuelas incluido, el homenaje a la esposa de Weiland “Mary, Mary” o “Just sixteen”, que sin matar demasiado se dejan escuchar. En esta ocasión también se cumple el cupo de las dos baladas de rigor con la versión del tema de la Electric Light Orchestra “Can’t get it out of my head” y con “Gravedancer”, esta última excesivamente parecida a “Fall to pieces”, tema publicado en su anterior disco.

En mi opinión el talento de Slash está totalmente desaprovechado dentro de este grupo. Quizás sea un virtuoso como arreglista de temas compuestos por otros, pero este estilo en el que ha entrado no le pega a un músico hard rockero con sangre de bluesman como él, cuyas máximas influencias son Jimmy Page, Jimi Hendrix o Joe Perry. El hecho de dejarse dominar de esta forma dice muy poco a favor de su capacidad de liderazgo y su peso dentro de Velvet Revolver.

En cuanto a la voz, pues es la que hay. Scott Weiland nos gustará más o nos gustará menos, podrá gritar más o podrá gritar menos, podrá arreglarse digitalmente la voz más o podrá hacerlo menos, pero a un cantante monorregistro y con voz de cazalla como él no se le pueden pedir grandes resultados más allá de que no desafine (que conociéndolo no es poco).

En resumidas cuentas, “Libertad” es un disco muy normal que si no fuera Slash el que toca la guitarra muchos ni nos pararíamos a escuchar.

viernes, 23 de noviembre de 2007

Dream Theater

Dream Theater, la banda de metal progresivo más importante y con más talento de todas las que existen en la actualidad, actuaron el pasado día 2 de Noviembre en el Pabellón Olímpico de Badalona con motivo de su gira mundial "Chaos in motion", y yo tuve la suerte de asistir a la cita. Después de varios meses con Héroes del Silencio como protagonistas del blog de El Artista Multimedia, ¿qué mejor terapia de desintoxicación de la sobredosis "heroicosilenciosa" que declarar artistas del mes de Noviembre del 2007 a este grupo de virtuosos músicos formado por James LaBrie, John Petrucci, Mike Portnoy, John Myung y Jordan Rudess?

La formación de Dream Theater ha ido variando desde su fundación en el año 1985 hasta la actualidad. John Petrucci en la guitarra, Mike Portnoy en la batería y John Myung en el bajo, todos ellos estudiantes del "Berklee College of Music", son los únicos músicos que han permanecido en la banda desde el principio. El primer teclista de Dream Theater fue Kevin Moore y el primer vocalista Chris Collins. Sin haber grabado un solo disco con el grupo, éste último sería substituido al cabo de un año por Charlie Dominici.

Charlie Dominici sólo llegó a grabar "When dream and day unite", el álbum de debut de la banda publicado el año 1989, ya que dos años más tarde fue substituido por el canadiense James LaBrie, el cual se ha mantenido en la banda hasta el día de hoy. Con James LaBrie, John Petrucci, Mike Portnoy, John Myung y Kevin Moore en la formación, entre 1992 y 1994 Dream Theater saltarían a la fama internacional con los discos "Images and words" y "Awake".

En 1994 el teclista Kevin Moore fue reemplazado por Derek Sherinian, también estudiante de Berklee. Derek Sherinian únicamente permanecería en Dream Theater durante tres años, participando en la grabación de los discos "A change of seasons" y "Falling into infinity". Finalmente, en 1997 se configura la formación definitiva de lo que hoy conocemos como Dream Theater, cuando Derek Sherinian es substituido por el virtuoso teclista Jordan Rudess. Rudess, antiguo estudiante de la escuela de Juilliard, ya había trabajado con Petrucci y Portnoy en su proyecto paralelo "Liquid Tension Experiment", y con él la banda alcanzaría su máximo nivel de creatividad, éxito y reputación dentro del mundo del heavy metal.

En el año 1999 sale a la luz "Metropolis Pt.2: Scenes from a memory", el trabajo discográfico más importante de Dream Theater hasta la fecha, considerado por los entendidos como una obra maestra del rock progresivo. Se trata de un disco conceptual compuesto como continuación del tema "Metropolis Pt. 1" incluido en el álbum "Images and words", cuya gira de promoción se prolongó durante más de un año.

A partir de "Metropolis Pt.2: Scenes from a memory" y hasta el día de hoy, Dream Theater ha publicado cuatro discos de estudio: "Six degrees of inner turbulence" en 2002, "Train of thought" en 2003, "Octavarium" en 2005 y "Systematic chaos" este mismo año, que aunque hayan ido variando ligeramente el estilo musical de cada uno de ellos, en todos se ha mantenido un altísimo nivel compositivo.

A pesar de sus claras y reconocidas influencias de artistas de la talla de Pink Floyd, Frank Zappa, Metallica o King Crimson entre otros, Dream Theater ha sabido crear su propio sonido y su propia seña de identidad musical. Pero donde realmente se aprecia y se disfruta de la calidad como músicos de cada uno de los Dream Theater es en sus conciertos. Si te perdiste la reciente gira española del grupo, no te preocupes, tienes la posibilidad de comprobarlo a través de la multitud de actuaciones publicadas en formato DVD que tienes en el mercado. Te aseguro que no te defraudarán.

Página web oficial: http://www.dreamtheater.net

miércoles, 21 de noviembre de 2007

El camino del exceso llega a su fin

Es alucinante cómo pasa el tiempo. Después de ocho meses con una ilusión, con una serie de fechas marcadas en el calendario y con unas ganas tremendas de ver hecho realidad el sueño de volver a disfrutar de mis ídolos musicales juntos de nuevo sobre un escenario, finalmente todo ha vuelto a la situación en la que estaba y de nuevo nos hemos quedado sin Héroes del Silencio.

Si tuviera que elegir una palabra que defina la forma como he vivido estos ocho últimos meses, esa sería "exceso". Puede parecer un topicazo, pero no encuentro una palabra más apropiada. Han sido ocho meses de exceso de ganas y exceso de ilusión por la llegada del momento de ver a Héroes del Silencio en directo; de exceso de información sobre el acontecimiento leída, recibida y ofrecida a través de Internet; de exceso de dinero gastado en entradas, viajes, pre-conciertos, post-conciertos y merchandising oportunista salido a rebufo del regreso; de exceso de horas de espera y de vigilia; y de exceso de artículos sobre Héroes del Silencio publicados en este blog.

Lamentablemente todo ha llegado a su fin y todo vuevle a la normalidad. Ha sido muy bonito y muy divertido este tiempo dedicado a la que es y será la banda de mi vida pero, a menos que ocurra algo extraño e inesperado, probablemente tarde en volver a escribir aquí sobre Héroes del Silencio.

Para finalizar me gustaría dar las gracias a toda la gente que, de una forma u otra, me ha acompañado en este camino. Entre ellos quisiera dar las gracias a Noko y a Gonzalo por haberme demostrado su confianza; a Marta, Leticia, Brenda, Daniel, Alberto, Marta y Jordi por acompañarme durante los conciertos de Zaragoza y Valencia; a Noko y a Marta de nuevo por hacer posible una visión preferente de los hechos; a Juan por enchufarme en las fiestas post-concierto, aunque sólo llegara a asistir a una; y por último a Carlos por su interés, su fiel seguimiento y su continuo apoyo a mi humilde trabajo en este blog.

Así que, como ya dijera Roger Waters allá por 1979, "The show must go on", que no sólo de Héroes del Silencio vive El Artista Multimedia.

domingo, 18 de noviembre de 2007

Concierto de Héroes del Silencio (Circuit de la Comunitat Valenciana Ricardo Tormo, Cheste 27/10/2007)

Héroes del Silencio encienden la traca final

Cuando el pasado 14 de Febrero se confirmaron los rumores del regreso de Héroes del Silencio, parecía que faltaba una eternidad para que llegara el momento de poder verlos en directo. Sin embargo, pronto se cumplirá un mes de la celebración del último concierto del grupo que tuvo lugar en el Circuit de la Comunitat Valenciana de Cheste. En principio yo no tenía ninguna intención de asistir a dicho concierto por ser en la provincia de Valencia, un lugar con el que no tengo absolutamente ningún vínculo ni ninguna relación. Sinceramente no me apetecía gastarme un dineral en viajes, entrada, alojamiento y estancia para ver un concierto, por mucho que se tratase de Héroes del Silencio. Fue a falta de un mes de la celebración de éste, y habiendo visto imágenes de los montajes y los conciertos de América, cuando finalmente me animé a comprar una entrada y a plantarme en Valencia en tren y sin alojamiento alguno, dispuesto a pasar la noche en vela a cambio de asistir al fin de fiesta de la gira de regreso de la banda que más me ha marcado musicalmente hablando. A pesar de todos los contratiempos sufridos he de decir que no me arrepiento en absoluto de la experiencia, sobre todo cuando, por casualidades del destino, pude conseguir una entrada preferente a ultimísima hora.

La operación “Traca final” no pudo empezar con peor pie. Varios días antes del fin de semana del 27 de Octubre, a causa de un incidente producido en las obras del tren de alta velocidad, RENFE había interrumpido el servicio de los trenes que realizan su entrada y su salida de Barcelona por la vía de Bellvitge. Casualmente el tren que debía llevarme a Valencia circulaba por esa vía, con lo que me vi obligado a viajar en autocar hasta Tarragona y desde allí tomar un tren hasta Valencia. La broma me costó una hora de retraso, llegando a la capital del Turia a las 16:00 h. en lugar de llegar a las 15:00 h. como estaba previsto. El concierto comenzaba a las 21:00 h., pero aún tenía que llegar al Circuito Ricardo Tormo de Cheste. Para ello, a las 17:00 h. aproximadamente, cogí un tren regional con parada en una zona próxima al circuito. Con tanquilidad y totalmente ajeno al caos circulatorio que se estaba formando en la carretera de acceso al circuito a falta de tres horas para el comienzo del concierto, sobre las 18:00 h. llegué al recinto y sólo me quedaba esperar a que comenzara el espectáculo.

La tarde era fría y durante el camino desde la estación de tren hasta la explanada donde se iba a celebrar el concierto empezaron a caer algunas gotas de lluvia que poco a poco se fueron intensificando. Una marea de gente con la mirada puesta en el majestuoso escenario ubicado en la parte alta de un montículo, nos íbamos encaminando hacia el aparcamiento del Circuito Ricardo Tormo, recordando aquellas escenas repetidas anualmente de miles de musulmanes peregrinando a la Meca. En el trayecto podían verse a lado y lado del camino infinidad de puestos de comida, bebida y venta de merchandising pirata, tantos que incluso llegaban a obstaculizar considerablemente el paso de la gente.

Una vez en el recinto, y habiendo superado los controles de acceso, la verdad es que me llevé una grata sorpresa con la organización y el despliegue de medios de la zona de recreo montada en las inmediaciones del escenario. Enormes barras de bar, diversos puntos de venta de merchandising oficial, gran cantidad de cabinas de urinarios públicos, algunas carpas de videojuegos, puestos de comida, gradas supletorias y hasta un toro mecánico, eran algunos de los servicios que se pusieron a disposición de las más de 80.000 personas que se esperaba que asistiesen al concierto, dejando a Zaragoza a la altura del betún. El caso es que sobre las 18:30 h. yo ya ocupaba la posición desde la cual iba a presenciar el show, que no era otra que la tercera fila de la zona preferente derecha. Haciendo uso de los transportes públicos y la zapatilla, y sin un minuto de atasco, dos horas y media antes del inicio del concierto ya tenía una ubicación envidiable.

A las 21:00 h., con la luna llena brillando sobre el cielo valenciano, se apagaban las luces del escenario e iniciaba el mismo ritual que he venido narrando en las dos crónicas anteriores: “Song to the siren” de This mortal coil sonando en la oscuridad. Esta vez la emoción que sentí ya no fue la de alguien que después de muchos años por fin ve realizado un sueño. La emoción era similar a la sentida cuando uno se despide para siempre de alguien o algo que sabe que no va a volver a ver. Pese a ser mi tercer concierto de Héroes del Silencio en menos de un mes, el primer RE menor de “El estanque” volvió a penetrar en mis sentidos y a erizar mi piel como ya me ocurriera el día 10 de Octubre en La Romareda. Después del mal sabor de boca que me quedó el día 12 de Octubre debido a mi pésima ubicación en la pista, en este concierto de Cheste traté de disfrutar al máximo y de prestar atención a todos los detalles posibles con la intención de llevarme para siempre el mejor recuerdo de la gira de regreso de Héroes del Silencio.

Como venía siendo habitual, después de “El estanque” vinieron “Deshacer el mundo” y “Mar adentro”, antes de la cual Enrique Bunbury saludó a Valencia desde el escenario central, e intentando divisar el horizonte exclamó: “¡Casi no veo al último!”. La verdad es que si uno echaba la vista atrás y se ponía de puntillas, el paisaje de un océano de más de 80.000 cabezas era sobrecogedor. Desde el principio se notó que Enrique Bunbury tenía la voz en perfectas condiciones y que ya estaba totalmente recuperado de su gripe. En cuanto al sonido, éste era espectacular con respecto al de La Romareda. No sé si será porque la acústica de un lugar abierto al aire libre es mejor que la de un estadio de fútbol rodeado por gradas y hundido en el suelo del centro de una ciudad, como lo es el de Zaragoza, pero el sonido desde la parte frontal del escenario era brutal. Supongo que los músicos también tendrían algo que ver en ello al estar mucho más rodados.

Después de “Mar adentro” la velada prosiguió de la misma forma que el día del Pilar, con un bloque de canciones formado por “La carta”, “Agosto”, “La sirena varada” y “Opio”, esta última con una equivocación en la entrada de la guitarra que fue motivo de broma entre los propios músicos. A continuación Enrique Bunbury se encaminó por última vez al mini escenario central para agradecer al público, y por extensión a todos los fans, el haber hecho posible que Héroes del Silencio hayan llegado a ser lo que actualmente son: la banda de rock más importante de España y parte de Europa. Tras la presentación habitual de los miembros del grupo por separado mientras estos se acercaban a él improvisando “La mala hora”, llegaba el momento del set más íntimo del concierto compuesto por “La herida”, “Despertar”, “Apuesta por el rock & roll” (con dedicatoria especial a Gabriel Sopeña y Mauricio Aznar del grupo zaragozano Más birras), “Héroe de leyenda”, “Con nombre de guerra” y “No más lágrimas”. Esta sería para mí la primera vez que escuchaba “Despertar”, uno de mis temas preferidos de “Senderos de traición”.

Con el sonido ensordecedor de las hélices proyectadas en las pantallas superiores, el grupo se dirigía hacia el escenario principal a través de la pasarela para poner en escena “Nuestros nombres”, con nuevos problemas en la entrada de la guitarra y un final en el que Enrique Bunbury se emocionó haciendo falsetes cuando la canción ya había terminado. Tras ésta vendrían “El mar no cesa”, “Entre dos tierras”, “Maldito duende”, “Iberia sumergida” y “Avalancha”, al final de la cual la banda se despidió de Valencia aunque no de forma definitiva. Tanto los que repetíamos como los que no, sabíamos que todavía faltaba la última parte del concierto. Efectivamente no sólo no había acabado sino que aún quedaban muchos temas, más que en cualquiera de las anteriores citas. Por ser el último de la gira, además de los temas fijos, Héroes del Silencio habían decidido interpretar la práctica totalidad de los temas que habían variado entre un concierto y otro. Así pues, con un Enrique Bunbury vestido con camisa negra brillante de manga larga en lugar de aquel chaleco que llevara en Zaragoza y que tan mal le había ido para su salud, el grupo volvía al escenario para tocar “Bendecida”, “Tumbas de sal” y “Oración” antes de volverse a retirar.

Después de unos minutos de descanso, el grupo volvía al escenario para dar las gracias a toda la gente que hizo posible la organización de la mastodóntica gira del milenio, y posteriormente interpretar “Tesoro”, “Fuente esperanza” y “La chispa adecuada”. Antes de ésta Enrique Bunbury volvió a solicitar al público su contribución en la iluminación mediante mecheros, móviles o linternas, creando un auténtico mar de puntos de luz en la explanada del aparcamiento del Circuito Ricardo Tormo de Cheste. Durante la lluvia de confetis plateados, Enrique Bunbury, visiblemente emocionado, se volvía a despedir de Valencia dando las gracias una y otra vez, recordando el nombre de la banda e insistiendo en que nunca les olvidásemos.

Mientras el público coreaba “¡Que no se retiren, que no se retiren!”, Héroes del Silencio volvían a escena una vez más, y esta sería la última, para tocar “Malas intenciones”. Tras ella, como en el resto de conciertos, Enrique Bunbury y Juan Valdivia se sentaban juntos en un escalón del escenario para iniciar “En brazos de la fiebre”, el último tema de la noche, de la gira y probablemente de la carrera de Héroes del Silencio. La emoción vivida durante este momento es inexplicable. La sensación de melancolía transmitida por la propia canción, sumada a la estampa de Enrique Bunbury y Juan Valdivia tocando juntos por última vez, al número final de Enrique alumbrando a Juan y al público, y al hecho de que, sin apenas darnos cuenta, la gira de reunión de Héroes del Silencio había llegado a su fin, hicieron de ese momento algo inolvidable. Incluso a los propios músicos, especialmente a Enrique Bunbury al que juraría haberle visto saltar las lágrimas, les costaba contener su emoción en el instante de la despedida. Como broche final, la organización del evento obsequió a la audiencia con un castillo de fuegos artificiales más grande de lo normal, muy apropiado para la región en la que estábamos, la tierra de las Fallas.

Así pues, definitivamente todo había acabado de una forma magnífica, digna de una banda tan grande como Héroes del Silencio. ¿Todo? No, aún quedaba salir del Circuito, llegar a Valencia y volver a casa, pero esa historia prefiero guardármela para mí. Tampoco lo voy a contar todo... ¿no?

miércoles, 14 de noviembre de 2007

Rarezas (Héroes del Silencio) 1998

Cuando la disolución de Héroes del Silencio estaba ya más que asumida por sus seguidores y Enrique Bunbury se encontraba inmerso en su recientemente estrenada y poco exitosa carrera en solitario, a finales de 1998 veía la luz un nuevo disco de Héroes del Silencio: “Rarezas”. Éste sería el primero de una auténtica marea de discos póstumos de la banda que vendrían años más tarde, aunque, como su propio nombre indica, “Rarezas” no es el típico álbum de grandes éxitos de Héroes del Silencio sino una recopilación de caras-b, temas inéditos y grabaciones en directo de difícil acceso hasta ese momento.

Todo el trabajo de selección de temas y posterior promoción por diferentes medios de comunicación fue llevado a cabo por Pedro Andreu y Joaquín Cardiel, los dos miembros de Héroes del Silencio más neutrales y con menor implicación en todos los problemas internos del grupo que motivaron su disolución. Juan Valdivia se desentendió absolutamente del disco y Enrique Bunbury, al estar tan ocupado con “Radical sonora”, apenas tuvo participación en el proyecto.

Aunque a priori pudiera parecer un disco artificial publicado únicamente para cumplir con las obligaciones contractuales firmadas con la casa discográfica (que puede ser que lo fuera), la verdad es que “Rarezas” no tiene desperdicio. Algunos temas, como “Apuesta por el rock & roll”, “Hologramas”, “El cuadro”, “Virus”, “Opio versión Ganges vals” y la remezcla de “Nuestros nombres” realizada por Noel Harris, ya habían sido incluidos como caras-b en diferentes singles del grupo. Otros, como “No más lágrimas” y “Héroes de leyenda”, pertenecían a antiguas grabaciones en directo publicadas en edición limitada. Pero lo que más interés despertó entre los fans de Héroes del Silencio fueron algunas de las maquetas del álbum “Avalancha” grabadas el año 1994 durante el retiro espiritual del grupo en el Hospital de Benasque. Entre ellas se encuentran el tema inédito “Babel” y las versiones de "Morir todavía”, “Parasiempre” (rebautizada como "... y para siempre”), “La chispa adecuada” y “Rueda fortuna” (con letra diferente y renombrada como “Medicina húmeda”).

Entre las canciones más destacables del disco podríamos nombrar “Babel” por ser hasta el momento un tema inédito, y Apuesta por el rock & roll”, un tema compuesto por Gabriel Sopeña y Mauricio Aznar del grupo Más birras, que sería la primera versión de otro grupo que Héroes del Silencio grababan de forma oficial en un álbum. En cuanto a las versiones de los temas de “Avalancha”, pese a ser mucho más contundentes que las versiones definitivas, verdaderamente no las mejoran en prácticamente nada.

Para el diseño y maquetación de la portada de “Rarezas” esta vez no se contó con ningún diseñador gráfico profesional ni con ninguna empresa de diseño experimentada. En esta ocasión se encargó del trabajo el mismo Joaquín Cardiel y el resultado no pudo ser más lamentable. La portada delantera e interior consistieron en una simple fotografía realizada a su colección particular de fotos, acreditaciones, portadas de álbumes y singles, y diferente tipo de artículos de coleccionista de Héroes del Silencio, esparcido todo ello sobre una alfombra de peluche que bien podría estar hecha con el pellejo del cadáver de Triki, el monstruo de las galletas. Por no haber no hay ni libreto.

“Rarezas” fue complementado con una cinta VHS en la que se recogían una serie de entrevistas al grupo realizadas en diferentes épocas y que por supuesto fue puesta a la venta de forma independiente al disco. El contenido de esa cinta recientemente ha sido publicado en formato DVD.

domingo, 11 de noviembre de 2007

Álbum del concierto de Héroes del Silencio (Cheste, Valencia 27/10/2007)

Este mes nuevamente me voy a saltar el protocolo publicando otro álbum de fotos en lugar de una única foto. De la misma manera que el mes pasado, este Noviembre os ofrezco una selección de las mejores imágenes que pude captar durante el concierto de Héroes del Silencio celebrado el día 27 de Octubre en el Circuito Ricardo Tormo de la localidad valenciana de Cheste. Como se puede observar por las veces que aparece Juan Valdivia, las fotografías fueron tomadas desde las primeras filas de la parte derecha de la zona preferente.

En esta ocasión me gustaría dar las gracias a Marta, mi amiga y compañera de fatigas "heroicosilenciosas-calamarianas", por haber hecho posible cuando parecía imposible el que pudiera conseguir una entrada preferente, y sobre todo por hacerme más agradables las muchísimas horas de espera que hemos pasado estos días, sin duda unos días para el recuerdo.


Autor: El Artista Multimedia en tercera fila y sin atascos.

jueves, 8 de noviembre de 2007

Parasiempre (Héroes del Silencio) 1996

Grabado durante su última gira española y publicado poco antes de la disolución del grupo, el día 28 de Septiembre de 1996 salía a la venta “Parasiempre”, un doble LP en directo que serviría como disco de despedida de Héroes del Silencio. Podría decirse que “Parasiempre” es el primer disco en directo de la carrera de Héroes del Silencio puesto que sus anteriores grabaciones oficiales en vivo, “En directo” y “Senda ‘91”, fueron dos mini discos publicados en edición limitada y con muy pocos temas en su interior. En esta ocasión el disco se editó a nivel internacional y con un total de diecinueve canciones, quedando así saldada la deuda con los fans menos madrugadores que no pudieron conseguir copias originales de “En directo” y “Senda ‘91”. Esta vez sólo se tuvo el detalle de regalar una cinta VHS con las 10.000 primeras copias del álbum, la cual contenía un breve documental sobre la gira “Avalancha”.

“Parasiempre” fue registrado a partir de la grabación de los conciertos celebrados los días 7 y 8 de Junio de 1996 en el Palacio de los Deportes de Madrid y en la Plaza de Toros de Zaragoza respectivamente. El disco es una muestra bastante fiel de lo que fue la última gira de Héroes del Silencio, una gira en la que, además de tocar gran parte de los temas de su último disco, el grupo obsequió a sus fans con un repertorio especial repasando los grandes éxitos de su carrera.

El primero de los discos comienza con un bloque de canciones del álbum “Avalancha” formado por “Deshacer el mundo”, “Iberia sumergida”, “Días de borrasca” y “Parasiempre”, y continúa con “El camino del exceso”, “La sirena varada”, “Maldito duende”, “La chispa adecuada”, “Oración” y una versión de “Nuestros nombres” con un final un tanto extenso que, además de minutos de relleno, no aporta gran cosa al tema original. El segundo disco comienza con “Hechizo”, “Entre dos tierras” y “Avalancha”, tras la cual Enrique Bunbury se despide del público con la expresión “Que os vaya bonito” recién adquirida en tierras mexicanas. A modo de bis, el disco sigue con un set acústico, que en los conciertos el grupo interpretaba sentados sobre taburetes en la parte frontal del escenario, compuesto por “Flor de loto”, “Flor venenosa” y “La herida”. Tras este momento íntimo y pseudomístico, el disco da sus últimos coletazos con “Mar adentro” y “Opio” versión “Ganges vals” con silbidos incluidos.

“Parasiempre” finaliza con una versión de “Decadencia” de once minutos de duración que, al más puro estilo “Dazed and Confused” de Led Zeppelin, se prolonga en un medley interminable compuesto por temas como “Hound Dog” de Elvis Presley, “La mala hora” de Radio Futura y una serie de estupideces poco originales que Enrique Bunbury va soltando quedándose tan ancho. Al final de la canción, Bunbury presenta a la banda y se despide de una forma premonitoria: “Nos vemos en la gira del próximo milenio”.

Como se habrá podido observar en lo escrito anteriormente, “Parasiempre” no es mi disco preferido de Héroes del Silencio ni mucho menos. Hay una serie de cosas que hacen que le tenga una especial manía y que no acabe de gustarme del todo. En primer lugar no entiendo cómo, si el disco está grabado a caballo entre Zaragoza y Madrid, la única referencia que hay a Zaragoza en todo el álbum es un discreto “Buenas noches Ciudad Inmortal” al principio de éste. Sin embargo, al final del segundo disco puede escucharse a Enrique Bunbury diciendo “Ustedes, Madrid, un público único”. ¿Es que todo el mundo ha de saber que Zaragoza es “La Ciudad Inmortal”? Escuchando el disco, cualquiera que no lo sepa puede llegar a pensar que éste se grabó íntegramente en Madrid, lo cual no sé si será premeditado por parte de la compañía discográfica. En segundo lugar no me gusta la producción realizada por Andy Jackson, el ingeniero de sonido del álbum “Avalancha”. A diferencia de “En directo” y “Senda ‘91”, en “Parasiempre” todo suena muy lejano y el público se escucha demasiado alto. Durante toda la grabación, la voz principal de Enrique Bunbury está al mismo nivel que los coros de Joaquín Cardiel y Alan Boguslavsky, y la guitarra de Juan Valdivia suena con el mismo volumen que la de Alan, ambas más bajas que la batería y el bajo. Vamos, un desastre.

Además, a estas alturas de la gira el estado de la muñeca izquierda de Juan Valdivia, aquejado de una grave tendinitis, ya era bastante precario, lo cual también queda reflejado en el disco. Escuchando con detenimiento es fácil darse cuenta que en algunas canciones (como por ejemplo “Deshacer el mundo”) donde debería sonar uno de esos solos de guitarra tan característicos de Juan, únicamente suena un breve punteo inicial y una sucesión de rasgueos rítmicos de guitarra. En otros temas con menos complejidad sí puede escucharse algún solo pero con mucha menos calidad de la que podría haber habido si Juan hubiera estado en plenitud de condiciones.

Por último, decir que en este disco hasta la portada es lamentable. En esta ocasión el trabajo de diseño y fotografía fue llevado a cabo por Joaquín Cardiel y Ana Ortiz de Landazúri, hermana de Enrique Bunbury. En la portada ni sale el grupo ni hay complejos símbolos como antaño, simplemente podemos ver una imagen tomada desde la platea del Teatro Ópera de México D.F., con la sombra de Enrique Bunbury agarrado a un micrófono proyectada sobre un fondo anaranjado. Todo un derroche de creatividad.

martes, 6 de noviembre de 2007

Avalancha (Zaragoza)

Con la proyección de una serie de ilustraciones diabólicas a través de las pantallas laterales, el uso de colores cálidos en la iluminación y la emanación de cinco columnas de fuego en la parte frontal del escenario, la puesta en escena de "Avalancha" puede que fuera una de las más espectaculares de todo el repertorio de Héroes del Silencio durante el pasado Tour 2007. Por esta razón, y para conmemorar la inclusión de este tema en el próximo Guitar Hero III de PlayStation, el vídeo del mes de Noviembre no es otro que una grabación de "Avalancha" realizada durante el concierto de Héroes del Silencio celebrado el pasado día 12 de Octubre en el estadio La Romareda de Zaragoza.

El vídeo es un fragmento de la filmación utilizada para la retransmisión en directo del concierto en diferentes salas de cine españolas. La manera como estas imágenes han llegado a la red de forma totalmente gratuita y con semejante calidad es digna de tebeo de Mortadelo y Filemón, y es una prueba más del ingenio que se despierta entre los fans cuando se trata de conseguir cualquier cosa que tenga que ver con Héroes del Silencio.

lunes, 5 de noviembre de 2007

El monográfico de Héroes del Silencio se prolonga hasta mediados de Noviembre

Debido a mi asistencia imprevista al último concierto del Tour 2007 de Héroes del Silencio celebrado el pasado día 27 de Octubre en el Circuito Ricardo Tormo de la localidad valenciana de Cheste, debido a las magníficas fotografías que tuve ocasión de realizar durante aquel evento, debido a la cantidad de vídeos de excelente calidad que en los últimos días están saliendo a la luz pública a través de Internet y debido a que todavía me queda algún que otro disco del grupo por reseñar; tengo el placer de comunicar a todos los lectores del blog de El Artista Multimedia que el monográfico sobre Héroes del Silencio verá prolongada su duración hasta mediados del mes de Noviembre.

Sé que hay gente a la cual le repatea las tripas semejante brasa que estoy dando sobre un grupo que ni les va ni les viene, pero por las causas anteriormente comentadas y por lo importantes que son Héroes del Silencio para mí, no tengo más remedio que hacerlo de esta forma. Pero tranquilos, no os preocupéis, que ya falta poco. Además, no os quejéis tanto que os estoy dando toda la información sobre los discos de Héroes del Silencio que no da el diario EL PAÍS en sus famosos Libro-CDs coleccionables. Tanta telepromoción hortera y tanto anuncio hasta en la sopa sobre unos fascículos coleccionables dedicados a Héroes del Silencio para luego publicar el mojón encuadernado que están publicando. En fin, viva el oportunismo lucrativo a costa de los Héroes del Silencio.

Pues eso, que continuamos con el monográfico.